
Tras los 'dientes de sierra' que supuso la activación del almacenamiento privado, el gráfico de las cotizaciones del aceite de oliva apunta nuevamente hacia abajo, para desgracia de los 108.000 olivareros jienenses y la economía de la provincia. Las cotizaciones medias semanales son desmoralizantes y más tras las grandes expectativas que había generado el concurso de Bruselas ante las reiteradas peticiones de España. Todas las calidades presentan una depreciación intersemanal. Llama especialmente atención lo que está sucediendo con los extras, el que aporta mayor valor añadido a los productores, que han pasado de venderse a un promedio de 2,014 euros en origen a 1,946, lo que supone una reducción del 3,4 por ciento en términos relativos. También se devalúa el virgen, precisamente el producto 'intervenido', que pasa de 1,750 euros el kilogramo a 1,651 (un 0,4 por ciento menos) y el lampante, que pasa de 1,659 euros a 1,651 (un 0, 5 por ciento menos).